Radius: Off
Radius:
mi Establecer el radio de geolocalización
Buscar

No, el COVID-19 no es igual que la gripe. Aquí las diferencias y similitudes

No, el COVID-19 no es igual que la gripe. Aquí las diferencias y similitudes

Aunque las dos son enfermedades respiratorias con síntomas parecidos, también tienen diferencias importantes que necesitamos conocer.

Por Redacción GM

A medida que avanza la propagación de la pandemia causada por el coronavirus SARS-CoV-2 proveniente de China, cada vez más personas en todo el mundo se preguntan sobre las similitudes entre el COVID-19 y la influenza o gripe.

Para responder estas inquietudes, expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicaron un informe en el que se comparan detalladamente los conceptos de ambas enfermedades infecciosas.

Similitudes entre COVID-19 y gripe

Las familias de virus responsables de la influenza o gripe y el nuevo coronavirus que causa el COVID-19 producen infecciones respiratorias que se manifiestan de formas similares: desde asintomáticas o leves hasta graves y mortales.

La transmisión de ambas enfermedades ocurre al entrar en contacto con las secreciones expulsadas por los infectados cuando tosen, estornudan o hablan y por medio de las superficies de objetos o sustancias que contaminaron.

Así entonces, las medidas básicas de salud pública para prevenir su infección son las mismas: el correcto y frecuente lavado de manos y la buena “etiqueta respiratoria” como toser y estornudar en el pliegue del codo o en un pañuelo desechable.

Diferencias entre COVID-19 y gripe

La rapidez con la que se transmiten los dos virus es una de las principales diferencias. El período de incubación (el tiempo desde la infección hasta que aparecen los síntomas) de la influenza es más corto que el del COVID-19. Igualmente ocurre con el intervalo entre la infección y la siguiente transmisión, mientras que en la gripe se estima en 3 días, en el COVID-19 el intervalo es de 5-6 días.

Esto significa que los virus que causan la influenza pueden propagarse más rápido que el coronavirus SARS-CoV-2.

Hay importantes diferencias entre COVID-19 y gripe.

Según explica la OMS, la transmisión luego del contagio y antes de que aparezcan los síntomas “es un importante impulsor” de la difusión del virus de la gripe. Respecto al coronavirus, al parecer las evidencias no indican que sea igual, aunque hay casos registrados en los que se propagó entre 24 y 48 horas antes de que manifestaran los signos del COVID-19.

El número de infecciones secundarias generadas por un individuo contagiado es entre 2 y 2,5 veces mayor en el coronavirus que en la influenza. Sin embargo, las comparaciones directas en este punto son difíciles de hacer, porque las estimaciones para ambos casos dependen mucho del contexto y del tiempo.

Los niños son importantes impulsores del contagio de la gripe en la comunidad. Pero en el caso del COVID-19, los datos iniciales muestran que los niños están siendo menos afectados que los adultos y que las tasas de infección en personas de 0 a 19 años son muy bajas. Otros datos de estudios preliminares hechos en China sobre transmisión del coronavirus en el hogar sugieren que los adultos son los que suelen infectar a los niños, y no lo contrario.

De los pacientes diagnosticados con el COVID-19, cerca del 80% no presentan síntomas o son leves, mientras que un 15% son casos graves y un 5% pasan a estado crítico. En cuanto a la influenza, las proporciones de casos graves y críticos son más bajas.

Las personas con mayor riesgo de infección grave por los virus de la gripe son los niños, las mujeres embarazadas, los ancianos y los pacientes con enfermedades crónicas o inmunodeprimidos. Para el COVID-19, lo que se sabe por ahora es que el riesgo de infección grave aumenta en personas de edad avanzada y con afecciones subyacentes.

El COVID-19 parece más letal que la gripe estacional. Según la OMS, aún tomará tiempo comprender completamente las cifras reales de esta enfermedad, pero con los datos que se tienen actualmente se estima una tasa de mortalidad entre el 3 y 4%. Para la gripe estacional, la mortalidad se ubica generalmente por debajo del 0,1%.

Todavía no hay vacunas o terapias autorizadas para el COVID-19, mientras que sí las hay para la gripe. Y aunque la vacuna contra la influenza no es efectiva contra el virus COVID-19, la OMS recomienda vacunarse cada año para prevenir la gripe.

¡Comparte y comenta este contenido en tus redes!

Loading